Enrique Tomás acaba de poner en marcha su nueva sede. La construcción, energéticamente eficiente y con más de 1 000 metros cuadrados por planta, se ubica en Badalona, ciudad natal de Enrique Tomás, presidente y fundador de la empresa. Según cuenta el propio Enrique Tomás, "cuando tuvimos definidas las líneas estratégicas a seguir en los próximos años, pusimos en marcha los cambios necesarios para conseguir los objetivos que nos habíamos fijado".
Tomás recuerda que "en apenas un año, se ha cambiado el sistema de gestión, se ha externalizado el reparto a las tiendas y se ha puesto en marcha una app de entrega a domicilio. Ahora inauguramos nueva sede, una de las más avanzadas en seguridad alimentaria a nivel mundial". El espacio se divide en tres plantas hábiles para el trabajo de oficina y producción, un parking y una amplia azotea preparada para suministrar energía solar a todo el edificio.
La planta inferior destaca por su bodega natural, con capacidad para almacenar hasta 15.000 jamones mientras alcanzan su grado óptimo de maduración. Esta planta también alberga el área de control de calidad, un espacio concebido para adaptarse a los estándares que hacen únicos a la marca y que ocupa más de 300 metros cuadrados.
El espacio lo completa una sala amplia con acceso desde el exterior, en el que se ubicará el centro de difusión de la cultura del jamón, un lugar de encuentro dedicado a compartir el conocimiento sobre el jamón con grupos escolares y visitantes de todo el mundo.