Las entidades Ipcena, Assemblea Pagesa, Plataforma Aturem la incineradora de Juneda y Pobles Vius exigen poner límites a la "lluvia de macroproyectos de plantas de biogás" que quieren instalarse en las comarcas de Ponent. Calculan que hay 26 proyectos en diferentes fases de tramitación que pueden llegar a tratar hasta 3,7 millones de toneladas de residuos anuales —32 proyectos y 4,5 millones de toneladas si se tienen en cuenta también los de la Franja—. Lo ven sobredimensionado y, por ello, reclaman abrir un debate para establecer un límite de plantas. Si no, alertan que Ponent se convertirá en una zona "especializada" en ser un "vertedero extensivo" de residuos y una "colonia energética" de las grandes ciudades, ha explicado Gerard Batalla, miembro de Pobles Vius.
Las cuatro entidades critican que no haya una planificación territorial que establezca límites y criterios para la implantación de plantas de biogás. Por eso, piden una moratoria en la aprobación de nuevos expedientes mientras se abre un debate social para determinar cuántas centrales puede acoger una comarca, qué volúmenes de purines se pueden tratar o qué distancia máxima pueden recorrer estos residuos para considerar que se trata de una energía sostenible, entre otras cuestiones.
Según estas agrupaciones, en las comarcas de Ponent y en la Franja hay 32 centrales de biogás, entre operativas, en tramitación y en promoción
Además, consideran que los proyectos que hay sobre la mesa están "sobredimensionados" y que, detrás del pretexto de tratar desechos ganaderos de granjas de la zona, hay el objetivo de tratar otros residuos procedentes de puntos más lejanos. Además, Gerard Batalla ha puesto en duda que los ganaderos paguen por llevar los purines a estas plantas, ya que los necesitan para abonar campos de cultivo. "Sí, hay excrementos, pero eso no significa que no se estén utilizando", ha indicado.