Flix (Ribera d'Ebre) ultima la creación de la primera comunidad energética de las Terres de l'Ebre que quiere implicar a particulares, empresas, comercios, entidades y administración local. De la implicación que consigan, dependerá la configuración jurídica, sea en forma de asociación o cooperativa, y también la inversión necesaria para promover instalaciones de autoconsumo particulares y colectivas.
La iniciativa de constituir una comunidad energética en Flix surgió del consell local para la República. Después de un ciclo de charlas con diferentes especialistas, este miércoles se ha convocado la constitución del grupo promotor. Después de este paso, tendrán que definir "las funciones" de la comunidad energética y de los socios, la configuración jurídica, la inversión necesaria, las fuentes de financiación y el reparto de beneficios. "Hacer las compras colectivas abarata costes, hay subvenciones, vías de financiación y entidades que lo facilitan", apunta Vicenç Alegre, uno de los impulsores del proyecto.
Uno de los principales objetivos del proyecto es comprar instalaciones conjuntas: adquirir un terreno de forma colectiva y crear un parque fotovoltaico para suministrar energía al municipio, así como incentivar que la mayoría de los vecinos instalen placas fotovoltaicas en las casas unifamiliares y bloques de pisos para alcanzar sus consumos. Los impulsores de la comunidad energética de Flix insisten que la transición energética en el país la deben liderar los ciudadanos y no depender de macroproyectos particulares. Tienen como referentes a pueblos europeos de Bélgica o Alemania, done ya se autoabastecen y venden los excedentes con beneficios. "No sé si llegaremos a esto, pero es un proceso que iniciamos y veremos hasta dónde llegaremos", ha dicho Alegre.