Mollerussa ha cerrado el fin de semana con 140.000 visitantes en la Feria de Sant Josep, evento que este año ha llegado a su 150 edición. Las calles de la capital de la comarca del Pla d'Urgell se han llenado de expositores de 253 empresas.
"Estamos muy satisfechos, ya que tenemos la mejor lamina expositiva de la historia de la feria", ha expresado el alcalde Marc Solsona. En la edición de este año, el recinto ferial ha crecido un 30% para llegar a la cifra de 21.923 metros cuadrados. El 70% de las firmas presentes en el certamen ya han expresado su predisposición a repetir experiencia el año que viene.
"El espacio es muy adecuado", expresa Gerard Gómez. En otro orden, el representante de la empresa Tractominguell escenifica "una pérdida de interés" por la compra, a causa de factores externos como la sequía y los efectos derivados de la guerra de Ucrania.