¿Qué es la inteligencia?

Organizado por el Open Industry, el Open Day unifica el tejido empresarial del Vallès Occidental reflexionando sobre los retos que afrontan la IA y la robótica

Josep M. Ganyet, en la conferencia 'Cómo triunfar en tiempos de IA en el Open Day | David Lombrana
Josep M. Ganyet, en la conferencia 'Cómo triunfar en tiempos de IA en el Open Day | David Lombrana
Barberà del Vallès
15 de Noviembre de 2024

“No tenemos una definición consensuada de lo que es la inteligencia artificial, porque no tenemos una definición consensuada de lo que es la inteligencia”. Esta fue la bienvenida del etnógrafo digital y CEO de Mortensen, Josep M. Ganyet al Open Day, la jornada impulsada por el Open Industry, la comunidad en línea nacida de la mano de los ayuntamientos de Sabadell, Barberà del Vallès y Sant Quirze del Vallès, y que este año celebra su primera década. Se trata de una comunidad de más de 800 miembros activos, que ha organizado más de 150 encuentros y decenas de proyectos colaborativos, con la intención de compartir conocimiento, crear red de contactos y difundir la labor de las empresas del territorio en el ámbito tecnológico.

Open Industry es la comunidad en línea nacida de la mano de los ayuntamientos de Sabadell, Barberà del Vallès y Sant Quirze del Vallès, y que este año celebra su primera década

¿Qué es la inteligencia?

Ganyet fue, con la conferencia Cómo triunfar en tiempos de IA (y de estupidez natural), el protagonista del Open Day, que por primera vez se celebró en formato presencial el pasado jueves en el Nodus Barberà. “¿Qué es la inteligencia? ¿Nos hemos de basar en el coeficiente intelectual? ¿En la inteligencia social? ¿En la espacial? ¿Quién es más inteligente? La inteligencia es multidimensional, por lo tanto, es complicado definirla”, afirmó el experto, proponiendo a pesar de ello la definición del prestigioso informático Stuart Russell, que sirvió como hilo conductor del acto: “Es la capacidad que tenemos los agentes inteligentes de aproximarnos a nuestros objetivos mediante acciones, teniendo en cuenta nuestro entorno”. La IA, por lo tanto, consistiría en dotar a las máquinas de esta capacidad.

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Y es que Ganyet no fue el único protagonista de la jornada; Enkitek, ABB Robotics o GMS Feeding Systems, así como sus respectivos dirigentes, Víctor Cantón, Sergio Martín y Xavier Sánchez, también lo fueron, como representantes de los tres municipios mencionados anteriormente. Se trata de tres empresas estrechamente ligadas a la tecnología -especialmente a la robótica-, y que compartieron ideas en un espacio moderado por la directora de VIA Empresa, Elena Busquets, quien condujo la jornada. 

Los peligros de humanizar las máquinas

“Presuponemos que los algoritmos y los robots son una amenaza; en la mayoría de las películas el robot siempre es el enemigo, como es el caso de Terminator, al final de la película siempre lo tenemos que matar. En cambio, si vamos a Japón, el robot es nuestro amigo, Doraemon es un ejemplo”, dijo Ganyet. Si bien sería un error desaprovechar la ayuda que la robótica puede suponer para la sociedad, especialmente en el ámbito industrial, el experto aseguró que “cuando humanizamos la tecnología pensamos que es más inteligente de lo que realmente es”: “Hablar inglés o pintar un cuadro requiere inteligencia, y como esto lo puede hacer una máquina, entonces esta parece inteligente; pero no, son procesos donde los humanos les introducimos unos datos de entrada, y generan unos datos de salida. La IA no es inteligente; es competente”.

Ganyet: "La IA no es inteligente; es competente"

En este sentido, Ganyet apuntó una curiosidad que, probablemente, muchos de los más de 180 millones de usuarios que tiene ChatGPT no han percibido: el chatbot se presenta a los usuarios con la amable pregunta “¿En qué puedo ayudarte?”; una cuestión que, según un conjunto de científicos, psicólogos y expertos “nos está haciendo mucho daño a todos”: “Ayudar es un verbo que usamos las personas, y humanizar el ChatGPT nos hace creer que está escribiendo, y no, está generando texto, que es una parte de la escritura. Pero esta también tiene que tener unos objetivos o una intención, que las máquinas no tienen”, añadió el etnógrafo digital.

Digitalización, datos y mucha robótica

La mesa redonda posterior a la ponencia de Ganyet, que contó con la participación de los representantes de las empresas vallesanas mencionados anteriormente, así como de Sandra Pérez, líder de Equipo Industria 4.0 de la Unidad de Innovación y Transferencia Tecnológica de Acción, puso en valor el potencial de la tecnología mediante ejemplos de estas mismas compañías: “Estamos intentando que el entorno del robot sea flexible, fácil de programar y de instalar. Hay que tener en cuenta que el 90% de las empresas de nuestro tejido son pequeñas o muy pequeñas”, subrayó Sergio Martín, mánager de la santquirzenca ABB, una de las principales proveedoras mundiales de robótica y automatización de maquinaria. “Si no somos capaces de adaptarnos rápidamente, producir y bajar costes, alguien más lo hará por nosotros”, dijo.

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En la misma línea, el CEO de Enkitek, Víctor Cantón, como máximo representante de una empresa que fusiona el mundo agrario con el de la robótica mediante el desarrollo de robots colaborativos para el cultivo de microgranjas, señaló que “hay tareas manuales muy difíciles de automatizar, pero hay algunas en las que sí se puede, como el monitoreo, que es precisamente una de nuestras propuestas mediante cámaras, que son cada vez más económicas”. “La digitalización se convierte en clave, porque en todas las tareas de nuestro día a día usamos datos, y con estos podemos ser más eficientes y ver hacia dónde podemos ir”, añadió Cantón.

En su turno, el director de GMS, Xavier Sánchez, destacó que “cada vez más, las empresas necesitan máquinas que sean más productivas, más flexibles y más sostenibles; y aplicando la IA, hacemos que nuestros clientes también lo puedan ser”, poniendo en el centro de la tecnología a las personas: “Hay mucho talento para según qué puestos de trabajo, pero falta mano de obra cualificada”.

La logística, presente y futuro en el ámbito de la robótica

Los tres representantes se mojaron a la hora de jugar a predecir el futuro, especialmente Martín, quien partiendo de la base de que “hoy día las fábricas de vehículos están totalmente automatizadas”, “lo que viene detrás es la logística”: “El robot crecerá en el ámbito de la logística, de aquí a 10 años veremos robots paletizando y organizando paquetes. Si la industria del automóvil es la número uno en automatización, la logística será la número dos”, vaticinó.

Cantón, Martín y Sánchez no fueron los únicos en hacer predicciones; Pérez también formó parte de este momento: “Hay una importante brecha entre el hype y la realidad de las empresas. Pensamos que la IA solucionará todos los problemas de las empresas, y no, hoy día solo resuelve preguntas muy concretas”, apuntó, sin dejar de animar a las empresas a llevar a cabo un diagnóstico de madurez digital y trazar una hoja de ruta de transformación digital: “En 2030, el 75% de las empresas europeas habrá tenido que invertir en tecnología para volverse competitivas, y mejorar la competitividad, eficiencia y sostenibilidad”.

Pérez: "En 2030, el 75% de las empresas europeas tendrá que haber invertido en tecnología para volverse competitivas, y mejorar la competitividad, eficiencia y sostenibilidad"

Como representante del ámbito público, Pérez imagina un futuro en el que “la administración sea más ágil y más capaz de dar respuestas inmediatas”. Con la presencia de los ayuntamientos de los municipios vallesanos, Pérez no fue la única representante del ámbito público. De hecho, la jornada terminó con un relevo simbólico, ya que los tres ayuntamientos organizadores hicieron el traspaso institucional al Consell Comarcal del Vallès Occidental, que asume la gobernanza del Open Industry a partir de ahora: “La colaboración de otros municipios se ha mantenido siempre a pesar de los cambios de gobierno, por lo tanto, esta es una alianza fuerte”, dijo el alcalde de Barberà del Vallès, Xavier Garcés, quien celebró “estos 10 años de éxito, de industrias y de negocios”: “La realidad económica de nuestros municipios es una realidad económica muy amplia, no nos podemos cerrar en nuestro municipio. Tenemos que seguir creciendo para ser competitivos”.