Un nuevo parque eólico en el Baix Camp

Una decena de aerogeneradores se instalarán en Riudecols, Duesaigües y Riudecanyes

Aerogeneradores instalados al Alt Camp | ACN
Aerogeneradores instalados al Alt Camp | ACN
Redacción VIA Empresa
Barcelona
17 de Agosto de 2020

En el año 2025, los municipios de Riudecols, Duesaigües y Riudecanyes tendrán 10 aerogeneradores nuevos. La construcción del nuevo parque eólico del Tarragonès -Lo Vedat del Pany- ya ha empezado con los trabajos de adecuación de los caminos, con una inversión total de unos 25 millones de euros. La potencia total de los molinos será de unos 26 megavatios (MW).

 

Esta instalación se encuentra al este y a continuación del parque eólico de Collet dels Feixos, que ya lleva años en funcionamiento. Los trámites administrativos por estos 10 nuevos molinos empezaron hace dos años y ahora ya cuentan con la licencia para hacer un primer soterramiento de cableado. Esta primera fase se prevé que esté acabada en 2022. Después, hará falta una segunda licencia para construir los aerogeneradores.

Oposición ecologista

Varios grupos ecologistas han mostrado su oposición al proyecto por el impacto sobre el paisaje que tiene. Una de las razones que exponen es que los aerogeneradores estarían cerca de la ermita de Puigcerver, de principios del siglo XIII. Según el regidor de Medio Ambiente de Riudecols, Raül Grau, "el último molino quedaría a unos 700 metros de la ermita y a 550 del mirador, pero este último no sabemos si lo harán".

 

El Ayuntamiento no se muestra contrario al parque eólico, pero admite que "ojalá no hubiera venido nunca" por los dolores de cabeza que les está dando. Además de la proximidad con la ermita de Puigcerver, algunos colectivos indican que la zona tiene un valor paisajístico y ecológico. Una de estas asociaciones es la Plataforma del Priorat.

Uno de sus miembros, Oriol Ponti, indica que este lugar es "una de las principales rutas de pájaros planeadores en migración y tiene una gran riqueza biofísica y ecológica". El problema, asegura, es "la falta de un debate abierto sobre las posibilidades de desarrollo de las comarcas agrícolas y del mundo rural en general, que instalaciones industriales de este tipo pueden condicionar irremisiblemente".