Renfe y Alstom han firmado un contrato para la compra de 152 trenes de gran capacidad para la línea de Cercanías. La operadora hará una inversión de 1.447 millones de euros en esta adquisición. Según ha comunicado la compañía, el contrato con Alstom, que fue aprobado por el consejo de administración de Renfe el pasado mes de marzo, contempla la fabricación de trenes de más de 100 metros de longitud. El acuerdo contempla también las piezas de parque, el almacén inicial de recambios y utillajes y el mantenimiento de 56 de los trenes durante 15 años.
Según ha anunciado Alstom, los nuevos trenes se destinarán íntegramente al servicio de Cercanías de los grandes cascos urbanos donde opera Renfe. Los convoyes tienen una capacidad de, como mínimo, 900 plazas cada uno – un 20 % más que los actuales. Minimizarían, además, el tiempo de subida y bajada de los pasajeros gracias a su diseño con 12 puertas, y garantizarán el acceso de personas con movilidad reducida.
Con este acuerdo, Renfe ha hecho la adjudicación más grande de la historia del ferrocarril a España. Según el comunicado conjunto de la operadora y la empresa, el contrato garantiza una "carga de trabajo para los próximos años" además de "un ambicioso plan de crecimiento y de inversión para el Centro Industrial" de Alstom – la factoría más grande de la empresa a España y Portugal, con más de 360.000 metros cuadrados de superficie.
Las inversiones a la planta, según ha anunciado la empresa, implica el aumento de su capacidad productiva y de generación de ocupación estable. Según las previsiones de la compañía, el acuerdo con Renfe creará 500 puestos de trabajo directos y más de 1.000 indirectas alrededor del Centro Industrial. También, según Alstom, el acuerdo garantiza nuevas inversiones a las instalaciones industriales, además de la "consolidación de un hub ferroviario en Catalunya"