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La avellana catalana se paga a un precio inferior que la de Italia y Turquía

La Unió de Pagesos considera insuficientes las cotizaciones fijadas en la Llotja de Reus y no descarta movilizaciones

Imagen de dos avellanas al árbol en un campo del Morell, al Tarragonès | ACN
Imagen de dos avellanas al árbol en un campo del Morell, al Tarragonès | ACN
ACN
Barcelona
04 de Septiembre de 2019
Act. 04 de Septiembre de 2019

La Unió de Pagesos ve insuficientes y "por debajo del precio de coste" las cotizaciones de avellana hechas públicas esta semana por la Llotja de Reus. Los precios fijados son 40 céntimos inferiores, de media, a los de Italia y Turquía, los principales competidores de los productores catalanes. Ante esta situación, la ejecutiva del sector se reunirá este miércoles anochecer en Reus para explorar la convocatoria de asambleas y movilizaciones.

 

El sector de la avellana esperaba que los precios fijados por la Llotja de Reos rondaran los 2 euros. "Que aquí nuestra variedad más buena –la negrita- esté a 1,70 euros y en Italia, la más mala, esté a 1,68 euros, no puede ser", reivindica el responsable nacional de los frutos secos de Unió de Pagesos, Rafel Español. Y es que mientras aquí la libra de avellana negrita se cotiza a 1,70 euros y el resto de variedades oscilan entre 1,45 y 1,55 euros, los principales mercados competidores tienen unos precios de entre 1,70 y 2,30 euros la libra.

Reunión de urgencia en Reus

Este miércoles al atardecer la ejecutiva del sector y el colectivo de jóvenes se reunirán a Reus para valorar la situación y abordar la posible convocatoria de asambleas y movilizaciones. "Este año tenemos una avellana buena. El consumidor la paga muy cara y en cambio el labrador no se puede ganar la vida. Es una vergüenza", insiste el responsable nacional de los frutos secos del sindicato.

 

Además, el responsable de la Unió de Pagesos ya se ha puesto en contacto con el Departament de Agricultura para denunciar que la Llotja de Reus "siempre abre a la baja". Y es que esta situación también se da con las cotizaciones de la almendra o la algarroba, por ejemplo, según denuncia la organización sindical.