• Wallapop, la red de los clasificados online

Wallapop, la red de los clasificados online

El fundador de LetsBonus crea una plataforma de compraventa de productos de segunda mano donde la geolocalització del usuario facilita el intercambio

Interfaç de Wallapop
Interfaç de Wallapop
Neus Navarro 
04 de Junio de 2014
Un usuario que quiere comprar y otro que quiere vender. La fórmula es sencilla pero nadie antes había convertido el clásico clasificado de papel (ya desterrat, prácticamente) en una red social que conecta compradores y vendedores que viven cerca. Si la distancia era uno de los inconvenientes más habituales en este tipo de transacciones, Wallapop soluciona el problema haciendo uso de la geolocalització para poner en contacto los 1,25 millones de usuarios que ya tiene en España.

Detrás de la idea está Miguel Vicente (@MiguelVicente_), emprendedor catalán responsable de la creación de LetsBonus . El éxito sin precedentes de la plataforma de compra colectiva que fundó el 2009 desde Sant Cugat del Vallès le ha permitido lanzarse a una nueva aventura empresarial.

Gran inversión inicial 
Aquí no empieza a andar a solas, a diferencia del que hizo antes, sino que cuenta con una plantilla de 25 personas y el apoyo y trabajo del CEO, Agustín Gómez y del otro cofundador, Gerard Olivé. "La creación ha sido totalmente distinta, pero el modelo es parecido a pesar de que esta es una compañía mucho más tecnológica. En 24 horas, desde Barcelona, podía empezar a rodar con una sola persona", explica Vicente a VIAempresa .

Wallapop empieza fuerte. Recientemente ha llegado a un acuerdo con el grupo Atresmedia (presidido por José Manuel Lara), por el cual el grupo de comunicación toma una participación en su accionariado a través de un modelo de media for equity. Sumando su aportación a las de Grupo Godó y Grupo Zeta -ya presentes en el accionariado-, el start-up dispone de unay nversió de 1,3 millones de euros en espacio publicitario en los diferentes apoyos del grupo de comunicación .

Y es que Wallapop ya disponía de 1,5 millones de euros de inversores como Caja Capital Riesgo, el fondo de capital riesgo Bonsai, ESADE Bando y la red de business angels Antai, además de contar con apoyo de ENISA y el Instituto Catalán de Finanzas (ICF).

Por qué es diferente Wallapop?
Vicente sostiene que el que hace única la app son tres factores: "Es un concepto móvil, en un sector que está creciendo a un ritmo vertiginoso. Además, la experiencia móvil permite que el producto sea geolocalitzat. También puedes ver el producto antes de comprarlo y, por último, es fácil de usar. En tres según has colgado tu producto", resume. Para redondearlo, el app incorpora un chat, utilidad propia de red social.

A pesar de estar al mercado desde el mes de octubre pasado, sus cifras son destacables. Actualmente, el valor de las transacciones que se realizan es de borde 10 millones de euros al mes. "Estamos trabajando para incorporar una plataforma de pago que las monetitzi, pero antes tenemos que mejorar la capacidad tecnológica de los usuarios", afirma Vicente.

Campaña a televisión
Usuarios queson ya unos cuántos: sólo en España hay 1.250.000 usuarios que se conectan, básicamente, en horario prime time, mientras descansan de su jornada o miran la televisión. La media del tiempo de dedicación es de 20 minutos, "porque pensamos que a la gente le gusta descubrir cosas nuevas", apunta.

Con este sentimiento, el de descubrir, sorprender y crear expectación, es arran el que han hecho girar su primera campaña publicitaria que ya se emite a las televisiones generalistas. Igual que con el nombre –"Walla!" no quiere decir nada, sino que alude la onomatopeya a menudo utilizada cuando se descubre algo nueva- , la campaña buscaba algo divertida, mágica. "Es cómo aquello que te explota, que te sorprende", matiza Vicente.

Las previsiones que esperan dejar con el "walla" a la boca a sus fundadores serían llegar a los dos millones de usuarios y crecer en países como Francia y Reino Unido. Con todo, Vicente afirma que todavía no se han marcado retos. Ellos también quieren experimentar la sorpresa que los da su cliente.