Los quioscos de Barcelona podrán vender café y productos alimentarios envasados que no requieran ninguna manipulación. En el caso del café para llevar, se especifica que solo podrá ser café de máquina, sin ningún tipo de manipulación. También podrán vender agua y refrescos y queda prohibida la venta de cualquier bebida alcohólica. Todo esto lo recoge el pliego de cláusulas para el funcionamiento de estos establecimientos situados en la vía pública que venden diarios, revistas, libros u otras publicaciones periódicas. La Comisión de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Barcelona lo ha aprobado definitivamente. La ampliación de la oferta de productos y servicios responde a una reivindicación del sector.
Además de la venta de café y comida sin manipular, el pliego también reduce al 51% el espacio que se debe destinar a exhibir diarios, revistas, libros u otras publicaciones periódicas, frente al 80% actual. Se mantiene la limitación de un 20% a la exposición de productos como recuerdos y otros, que deberá formar parte del 49% no dedicado a prensa o publicaciones.
Además de la venta de café y comida sin manipular, el pliego también reduce al 51% el espacio que se debe destinar a exhibir diarios, revistas, libros u otras publicaciones periódicas, frente al 80% actual
Entre los límites para incorporar estos nuevos productos, la propuesta aprobada especifica que "no se podrá habilitar ningún espacio, ni mobiliario ni elementos tanto en el interior como alrededor del quiosco para el consumo de los productos autorizados" por el pliego, lo que imposibilita, por ejemplo, la instalación de barras, sillas o mesas.
También hay cambios en el ámbito del horario. Hasta ahora debían abrir un mínimo de ocho horas diarias, preferentemente de 7:00 a 15:00 horas de lunes a sábado y de 8:00 a 15:00 horas los domingos. Con el nuevo pliego se fija un horario mínimo de apertura de 9:00 a 14:00 horas para todos los días de la semana, aunque se acepta que esto se pueda adaptar si el titular lo solicita en función de la ubicación y el Ayuntamiento lo acepta.
Actualmente, hay 287 quioscos en la vía pública barcelonesa, 51 menos que en 2018. 253 tienen adjudicación vigente, 25 se encuentran vacantes y 9 más forman parte del proyecto liderado por la cooperativa creada por el Instituto Municipal de Personas con Discapacidad (IMPD).