Un perro abandonado en la calle, un parque de tu municipio que no cuenta con espacios adaptados para personas con problemas de movilidad o una playa llena de basura. Estos sólo son algunos ejemplos de situaciones que te puedes encontrar en tu ciudad; y no te gustaría poder hacer algo para evitarlas? Pues sólo tienes que hacer una fotografía y colgarla a la app de Fotoraporto para que la problemática coja visibilidad.
Albert Bauló, Rosa Mora y Lorenzo Raganzini son los fundadores de esta startup, que ha diseñado una aplicación móvil para "expresar en imágenes las inquietudes de las personas respecto a cosas que se pueden cambiar o mejorar", explican. Así, a través de Fotoraporto , los usuarios pueden crear causas y subir fotografías para ayudar a difundir la problemática. A medida que se van subiendo fotos y se van compartiendo en las redes sociales, las causas consiguen más visibilidad.
Imágenes que cambian el mundo
Fotoraporto se basa en la idea que sean las mismas personas, asociaciones, ONGs o empresas implicadas en RSC que vayan creando causas sobre alguna injusticia social que querrían denunciar y suban fotos para ilustrar la problemática. Las causas pueden ser desde locales hasta globales. Por ejemplo, temas de maltrato animal, de denuncia de derechos laborales de mujeres o temas medioambientales. "Son todas aquellas situaciones injustas que nos podemos encontrar en nuestro día a día y que creemos que se pueden solucionar sencillamente dándolos visibilidad", señala Bauló.
Fotoraporto quiere introducir una plataforma de 'crowdfunding' para ayudar a financiar a asociaciones que luchen contra injusticias sociales
Los usuarios del app pueden tener diferentes niveles de implicación en función de su participación. Así, puede haber usuarios que están comprometidos con una causa y la quieren crear dentro de la plataforma. Pero también personas que, aunque no han creado ellas la causa, ven alguna situación en la calle que quieren cambiar y hacen una foto y la cuelgan a la plataforma. Y finalmente hay el usuario pasivo, aquel que sólo consulta las causas que hay a la app, ve las fotografías y ayuda a compartirlas a través de las redes sociales.
El app, que salió al mercado el febrero de este año, prevé introducir a lo largo de este año una plataforma de crowdfunding para ayudar a financiar las asociaciones que están trabajando para cambiar algunas situaciones de injusticia social.
De momento, la startup todavía no tiene una gran comunidad de usuarios pero sus fundadores ya están trabajando en diferentes alternativas para darse a conocer. Fotoraporto ha lanzado una campaña a Twitter y también se ha puesto en contacto con asociaciones y organizaciones de ámbito catalán para difundir entre sus asociados la existencia de la plataforma.
Raganzini, Mora y Bauló, fundadores de Fotoraporto | Cedida
Unir la fotografía con la conciencia social
La startup nació a raíz de la afición de sus fundadores por la fotografía y de su implicación en temas sociales. "Vimos que al mercado no había ningún app como Instagram o Pinterest basada en imágenes sobre estos temas más reivindicativos y por eso pensamos que sería una buena oportunidad juntar la fotografía con la conciencia social", explica Bauló.
Para poner en marcha el proyecto, los fundadores de Fotoraporto participaron en el Programa de Emprendeduría Social de Barcelona Activa, el cual los ayudó a detectar las necesidades de las asociaciones y organizaciones que se dedican a temas de impacto social.
El modelo de negocio de la startup se basa en la esponsorització de causas por parte de empresas que quieren hacer RSC y en una comisión respecto a las operaciones realizadas a la plataforma de crowdfunding .
Fotoraporto todavía es muy joven y tiene pocos meses de vida, pero los emprendedores son ambiciosos y quieren "ser el app de referencia a escala mundial en dinamizadores de causas de impacto social con imágenes", apunta Mora. Por eso, los objetivos de este 2018 son dar a conocer la plataforma y conseguir los usuarios y las causas necesarias que para cambiar o mejorar problemáticas sociales.
