Según un reciente informe de la ONU cada año se filtran al océano 13 millones de tonelades de plástico, lo cual se estima que es la causa de la muerte de 100.000 especies marinas año tras año. Ante esta situación insostenible un grupo de exdirectivos de Danone, Coca-cola y Schweppes amantes del océano han decidido dar un paso adelante y generar alternativas de consumo. Uniendo sus grandes pasiones por la alimentación saludable y el respeto hacia el mar han creado Ocean52, una stratup de bebidas con ingredientes marinos y sin envases de plástico.
Santi Mier, fundador y CEO de Ocean52, define sus productos como "la hidratación para los amantes del océano". La compañía ofrece varios tipos de agua, agua con gas y bebidas isotónicas que contienen minerales procedentes del océano, fuente de magnesio y oligoelements. Actualmente, la empresa ofrece tres tipos de bebidas: Ocean Recovery, un tipo de isotónico bajo en calorías, complementado con minerales oceánicos y con sabor de limón o frutas de la pasión; también ofrecen agua con gas compuesta por un 95% de agua de manatial y un 5% de agua de mar, la Ocean Sparkling; y finalmente, la No Plastic Water, la primera agua natural envasada en aluminio de todo el Estado español, según Mier, exvicepresident y exdirector de Marqueting de Danone.
La startup, que nace el 2018 y empieza la comercialización de su producto el marzo de 2019, no sólo se plantea abastecer el mercado de una alternativa a los envases de plástico de las bebidas sino que también quiere colaborar en la protección del océano a través de la formación, la concienciación y la visibilización. La empresa quiere permear en ámbitos de consumo para cambiarlos hacia unos más sostenibles. "Nosotros recomendamos beber del grifo y sólo si es necesario bebe de esta lata" ejemplifica Mier.
"Nosotros no queremos ser una compañía que siga introduciendo plástico en el sistema, no se trata de reciclar sino de no emitir más"
Aluminio para combatir el plástico
A pesar de que hay plásticos que se pueden reciclar -una minoría- Ocean52 rehusó la idea de crear sus envases con este tipo de plástico. "Nosotros no queremos ser una compañía que siga introduciendo plástico en el sistema, no se trata de reciclar sino de no emitir más" argumenta Mier y añade: "El océano ya no aguanta ni una sola migaja más".
Por eso Ocean52 sólo trabaja con vidrio y aluminio para fabricar sus envases, puesto que los dos son productos eternamente reciclables. En el caso del aluminio se trata del material para envases más reciclado del mundo. "El 72% de todo el aluminio que se ha extraído en la historia sigue en uso, mientras que el 91% del plástico acaba quemado o tirado a la naturaleza" expone Santi Mier.
El CEO de Ocean52 defiende las grandes ventajas que los productos reciclables aportan a una empresa. Poniendo de ejemplo el aluminio, del cual cada vez que reciclan una lata recuperan al 99% del material utilizado sin perder calidades o propiedades. Santi Mier sostiene que son productos que tienen más futuro en el mercado, puesto que la mayoría de los plásticos no son rentables cuando sólo se puede hacer un uso. "Nadie quiere un producto que sirva sólo una vez", sentencia Mier.
52 semanas velando por el océano
La compañía se fundó con la intensió de dar el 52% de su facturación a proyectos que promuevan la conservación de los océanos. Elegir esta cifra tan concreta responde a dos razones. La primera es que la empresa quiere dar más de lo que recibe, por Mier los negocios tienen que estar al servicio de la sociedad y esta es su manera de hacerlo. La segunda razón es porque la startup quiere llegar a tener recursos suficientes para estar 52 semanas al año protegiendo el océano.
"Desde el primer día estamos dando más a personas, investigación y difusión de mensajes para proteger el océano que no en actividades típicas de marketing o promoción"
La empresa está dando actualmente el 52% de las ganancias que calculan que tendrán en cuatro años. Este cálculo se debe de al hecho que es cuando esperan tener beneficios. "Desde el primer día estamos dando más a personas, investigación y difusión de mensajes para proteger el océano que no en actividades típicas de marketing o promoción" asegura Santi Mier.
Actualmente, están trabajando con varias entidades que promueven la protección de los mares como el Instituto de Ciencias del Mar o lo proyecto Vías Bravas. También participan en proyectos en Francia como Water Family, donde la formación sobre protección oceánica de la empresa llega hasta 20.000 alumnos. Además, Ocean52 cuento con embajadores de su proyecto que difunden los mensajes de la startup. Santi Mier destaca la variedad de perfiles que se reúnen entre las filas de los embajadores de la startup."A veces no son muy mediáticos pero son gente de océano" concluye.
Entre los embajadores podemos encontrar gente como Pelayo Salinas un biólogo marino que trabaja en las Islas Galápagos para National Geographic y con quienes tienen un acuerdo para hacer formación sobre biología marina a los jóvenes para que puedan hacer de divulgadores científicos. Otro embajador del proyecto es Antonio de Rosa, un deportista extremo que acaba de cruzar en solitario el Océano Pacífico para mostrar y denunciar la gran cantidad de plástico que se encontraba por el camino.
Implantación y futuro
Desde marzo de 2019 ya han llegado a más de 1.000 puntos de venta en mercados y supermercado como Carrefour, Alcampo o Eroski. También son presentes en el sector de la hostelería y la restauración, en especial a la zona de Baleares y Catalunya. Además, recientemente están llegando a los comedores de grandes empresas como Inditex, Banc Sabadell y Price Waterhouse Coppers.
"La verdad estamos sorprendidos de la buena y rápida acogida que tenemos" reconoce Santi Mier. A pesar de la buena aceptación el CEO reconoce que cuesta mucho dejar de consumir un producto aunque se sepa que genera residuos de plástico si no se ofrece un precio más competitivo.
Les ha surgido demanda en Australia pero exportar el producto hasta la isla oceánica deja una huella medioambiental que la compañía no está dispuesta a generar
Por eso Ocean52 plantea consolidarse para poder ofrecer productos más competitivos pero sin perder la esencia mediambientalista que los ha llevado a crear la compañía. Santi Mier lo ejemplifica con una decisión que tuvieron que tomar recientemente. Ocean52 actualmente opera en España y Francia, y los ha surgido demanda a Australia pero exportar el producto hasta la isla oceánica deja una huella medioambiental que la compañía no está dispuesta a generar. "Hasta que no podamos producir allá preferimos no enviarlo" concluye Mier. La stratup ya está mirando de empezar a producir allá.
El principal objetivo de futuro y fundacional de la empresa es ofrecer alternativas al plástico para facilitar un consumo responsable. "Somos una empresa que ha nacido para cambiar la forma de consumir bebidas y que no sean sólo bebidas saludables para el consumidor sino también para el océano" asegura Santi Mier.