Si el móvil ya se ha convertido en una herramienta casi imprescindible, pronto podremos obviar este "casi" y afirmar que es totalmente necesario en el día a día. Permite trucar, hacer fotografías, tomar notas, navegar por Internet... y, por si no fuera ya bastante polifacético, ahora también permite hacer transferencias monetarias a contactos de la agenda. Bien, no es que lo haga el aparato en si, sino las aplicaciones móviles, y en este caso hablamos de Verso .
Hace sólo ocho meses que esta app creada por tres jóvenes emprendedores situados en Barcelona salió al mercado. Pero en este corto recorrido, han conseguido cerrar dos rondas de financiación que superan los 10 millones de dólares de la mano de inversores destacados enel entrepreneurial ecosystem de Silicon Valley. "En la última transacción hemos conseguido 8,3 millones de dólares", concreta Àlex Lopera, uno de sus socios fundadores, quienes menciona la participación Greycroft Patners, eVentures y Spark Capital – "inversor de Twitter y Oculus"- en la operación. También participaron en la primera edición del programa de desaceleración Menorca Millennials.
Adaptarse en el siglo XXI
A pesar de que la compañía está registrada como norteamericana, su base se encuentra en Barcelona y cuenta con una decena de trabajadores. Están ya presentes en 16 países europeos, pero no se plantean hacer el salto al mercado americano a pesar de haber los contactos y los inversores con quienes tienen relaciones gracias a su paso por el continente.
Están arraigados a Silicon Valley desde su participación en la aceleradora fintech y de realidad virtual BoostVC, donde trabajaron durante tres meses a principios del 2015 para desarrollar un software que entonces se encontraba a medio camino del producto que lanzaron un año más tarde. "En aquel momento trabajábamos con una plataforma que tenía que integrar 17.000 cajeros automáticos para vender Bitcoins ii retirar efectivo", explica Lopera.
Al volver en España, la idea mutó hasta convertirse Verso. La causa, según el socio fundador, no fue más que la misma experiencia: "Empezamos a analizar los datos que teníamos y la herramienta, y vimos que había una oportunidad más grande si desarrollábamos una solución mobile que facilitara el pago entre amigos que están constantemente debiéndose de dinero y pagándose cosas". Y es que si una cosa tiene clara Lopera, es que las transferencias bancarias "siguen siendo lentas" y que la experiencia de usuario "no es la que una persona del siglo XXI esperaría". El resultado? Verso, una herramienta que sí que cubre las necesidades. Una herramienta que, como arrecia el emprendedor, quiere ser "el WhatsApp de los pagos".
El futuro del blockchain
La seguridad es una de las principales preocupaciones de la startup, por eso cuentan al equipo con ex trabajadores de empresas pioneros en el negocio de Internet como Google o Twitter. Pero el que asegura que no habrá ningún tipo de fraude en la aplicación es el hecho de estar basada en la tecnología blockchain y de tener toda la información encriptada.
Por si los más escépticos todavía dudan, Lopera recuerda que se trata de una industria "muy regulada". "El Banco de España nos obliga a tenerlo todo totalmente trazado, de forma que la tasa de fraude es prácticamente nula. No hay prácticamente nadie que haya perdido todo su dinero", insiste.
A todo esto también hay que sumar que los fundadores tienen experiencia en el uso del Bitcoin. Lopera y Borja Rossell habían sido al frente de BTC Point, una startup que creaba cajeros automáticos para obtener monedas y que hoy en día dejado de operar. El último socio, en Dario Nieuwenhuis, cuenta con experiencia a Google, donde había trabajado antes de embarcarse Verso.
Ganarse el cliente millennial
No pueden hablar de número de usuarios ni de ingresos, porque son todavía cifras poco significativas por los objetivos que tienen marcado. Cobran entre el 1,5% y el 2% de las transacciones por cambio de divisas, un margen pequeño pero suficiente para ir picando piedra y "hacer crecer la base de usuarios", el que Lopera identifica como el hito principal.
Pero son jóvenes y ambiciosos, por el que la idea clara es convertirse en la plataforma líder de pagos en Europa para millennials. Saben que la competencia crecerá, y que ahora ya es fuerte, una realidad que no los para. "Nuestras transacciones se hacen en el momento, no son lentas como las de los bancos", recuerda el socio fundador, "y nosotros seguimos trabajando día y noche para ofrecer el mejor servicio en nuestros usuarios". Precisamente esto es el que juega en su favor, "la respuesta que da la competencia a los retos del mercado es más lenta".
Hace sólo ocho meses que esta app creada por tres jóvenes emprendedores situados en Barcelona salió al mercado. Pero en este corto recorrido, han conseguido cerrar dos rondas de financiación que superan los 10 millones de dólares de la mano de inversores destacados enel entrepreneurial ecosystem de Silicon Valley. "En la última transacción hemos conseguido 8,3 millones de dólares", concreta Àlex Lopera, uno de sus socios fundadores, quienes menciona la participación Greycroft Patners, eVentures y Spark Capital – "inversor de Twitter y Oculus"- en la operación. También participaron en la primera edición del programa de desaceleración Menorca Millennials.
Adaptarse en el siglo XXI
A pesar de que la compañía está registrada como norteamericana, su base se encuentra en Barcelona y cuenta con una decena de trabajadores. Están ya presentes en 16 países europeos, pero no se plantean hacer el salto al mercado americano a pesar de haber los contactos y los inversores con quienes tienen relaciones gracias a su paso por el continente.
Están arraigados a Silicon Valley desde su participación en la aceleradora fintech y de realidad virtual BoostVC, donde trabajaron durante tres meses a principios del 2015 para desarrollar un software que entonces se encontraba a medio camino del producto que lanzaron un año más tarde. "En aquel momento trabajábamos con una plataforma que tenía que integrar 17.000 cajeros automáticos para vender Bitcoins ii retirar efectivo", explica Lopera.
Al volver en España, la idea mutó hasta convertirse Verso. La causa, según el socio fundador, no fue más que la misma experiencia: "Empezamos a analizar los datos que teníamos y la herramienta, y vimos que había una oportunidad más grande si desarrollábamos una solución mobile que facilitara el pago entre amigos que están constantemente debiéndose de dinero y pagándose cosas". Y es que si una cosa tiene clara Lopera, es que las transferencias bancarias "siguen siendo lentas" y que la experiencia de usuario "no es la que una persona del siglo XXI esperaría". El resultado? Verso, una herramienta que sí que cubre las necesidades. Una herramienta que, como arrecia el emprendedor, quiere ser "el WhatsApp de los pagos".
El futuro del blockchain
La seguridad es una de las principales preocupaciones de la startup, por eso cuentan al equipo con ex trabajadores de empresas pioneros en el negocio de Internet como Google o Twitter. Pero el que asegura que no habrá ningún tipo de fraude en la aplicación es el hecho de estar basada en la tecnología blockchain y de tener toda la información encriptada.
Por si los más escépticos todavía dudan, Lopera recuerda que se trata de una industria "muy regulada". "El Banco de España nos obliga a tenerlo todo totalmente trazado, de forma que la tasa de fraude es prácticamente nula. No hay prácticamente nadie que haya perdido todo su dinero", insiste.
A todo esto también hay que sumar que los fundadores tienen experiencia en el uso del Bitcoin. Lopera y Borja Rossell habían sido al frente de BTC Point, una startup que creaba cajeros automáticos para obtener monedas y que hoy en día dejado de operar. El último socio, en Dario Nieuwenhuis, cuenta con experiencia a Google, donde había trabajado antes de embarcarse Verso.
Ganarse el cliente millennial
No pueden hablar de número de usuarios ni de ingresos, porque son todavía cifras poco significativas por los objetivos que tienen marcado. Cobran entre el 1,5% y el 2% de las transacciones por cambio de divisas, un margen pequeño pero suficiente para ir picando piedra y "hacer crecer la base de usuarios", el que Lopera identifica como el hito principal.
Pero son jóvenes y ambiciosos, por el que la idea clara es convertirse en la plataforma líder de pagos en Europa para millennials. Saben que la competencia crecerá, y que ahora ya es fuerte, una realidad que no los para. "Nuestras transacciones se hacen en el momento, no son lentas como las de los bancos", recuerda el socio fundador, "y nosotros seguimos trabajando día y noche para ofrecer el mejor servicio en nuestros usuarios". Precisamente esto es el que juega en su favor, "la respuesta que da la competencia a los retos del mercado es más lenta".
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