Hay que ser atrevida para sentarse a hablar de ética en tiempos de crisis con Genís Roca, pero de algo hay que morir. Y no lo digo porque sea un riesgo hablar con él –riesgo es no hacerlo-, sino porque siquiera intentar estar a la altura de sus reflexiones es una temeridad. Aun así, en un día lluvioso –otro más- me he puesto un labio bien rojo por aquello de “al mal tiempo, buena cara” y me he sentado a desayunar con uno de mis maestros.
A desayunar desde mi cocina y él desde la suya, conectados mediante un Live de Instagram, y compartiendo con todos los que se han unido –más de 100 personas- un poster de Pipi Calzalargas como elemento decorativo principal de su cocina. Y es que esta semana, con esa sutileza tuitera que le caracteriza, Genís bromeaba en Twitter sobre las vídeollamadas. “Si no tienes una librería ya no puedes hacer vídeollamadas desde casa”. Y por supuesto, hoy para nuestro directo no tenía una librería de fondo, sino un calendario de uno de los personajes de nuestra infancia (somos casi coetáneos).
La gestión que empresas y gobiernos están haciendo de nuestros datos es uno de los asuntos de los que más se ocupa y preocupa Genís. Se ocupa divulgando en sus redes sociales, en sus conferencias, en los medios de comunicación y se preocupa como ciudadano apoyando a organizaciones como Civio. "En este momento se está utilizando el dato para la mejora del bien común como por ejemplo, saber por la geoposición de móviles, si hay reuniones que no deberían celebrarse. Si ese uso es anonimizado no me inquieta. Pero entonces, que la administración lo comparta porque la información es de todos", dispara Genís a los pocos minutos de arrancar.
Estos días se pueden leer por doquier alabanzas al totalitarismo chino y al férrero control a sus habitantes como clave del control de la pandemia. La seductora lógica del totalitarismo, titulaba Marta Peirano en eldiario.es hace unos días. Lo comento con Genís para introducir en la conversación las aplicaciones móviles que se están creando desde algunos gobiernos como la del Departamento de Salut de la Generalitat, como la app 'StopCovid19Cat'. Si lo que queremos es que todo esto pase y se controle, que nos pidan lo que sea necesario, ¿no?, pregunto recogiendo el sentir de muchas personas que me lo comentan. “La mayoría de apps sobre Covid19 piden más información de la que necesitan. La praxis correcta es acotar la información que se necesite y no querer acumular el dato porque sí. Entiendo que en esta crisis todo va muy deprisa. Pero, cuanto menos, produce inseguridad jurídica", me responde Genís, ocupado en defender siempre que puede la propiedad de nuestros datos.
Roca lleva años explicando la diferencia entre el dato capturado y el dato merecido y en tiempos de coronavirus esto debe seguir vigente, pese al miedo, la velocidad y la incertidumbre. "Debemos diferenciar entre dato capturado y dato merecido. El primero es aquél que alguien extrae de mi comportamiento, el segundo es el que yo cedo para compartir una inquietud o necesidad. Hoy con excusas como seguridad o servicios, nos estamos pasando con esto”.
A mitad de nuestra conversación de cocina a cocina, siguen llegando personas al directo. Algunas saludan al entrar en el directo, otras lanzan corazones cuando Genís Roca dice cosas como estas: "Quien controla el dato, controla el relato. Si la industria textil está colaborando en esta pandemia, produciendo mascarillas, igual la empresa tecnológica puede contribuir a predecir cosas con la explotación de estos datos. Si el dato es de todos, debe compartirse", insiste.
Y aunque hoy le he convocado a hablar de datos, no he podido resistirme a preguntarle por su visión como historiador, con esa impresionante capacidad que tiene para “leer” lo que nos pasa mucho antes de que el resto nos demos cuenta siquiera de que está pasando. "La historia de la humanidad es la evolución de modelos de gestión para ir manejando una población cada vez mayor. Cuando se va complicando la gestión del grupo, hay que modificar las reglas del juego. Europa llegó tarde y ahora estamos peleando solos en algo que es global".
Siguen apareciendo corazones en directo en Instagram que señalan admiración por sus reflexiones, como también pasará después en Twitter. Y es allí donde encuentro el cierre perfecto para mi entrega diaria de este diario de una autónoma en cuarentena.
Dice Juanjo Brizuela: “La charla de hoy en directo de Genís Roca y Belike Software tiene tantos kilates que hay que ponerla en bucle una y otra vez. Tenemos una realidad complicada, difícil de reconstruirla bien. Pero han dado suficientes argumentos para ello”.
Gracias maestro.