Los jóvenes cada vez están más interesados en comprar un piso en vez de alquilarlo. Y es por algo. Fotocasa ya apuntaba que la tendencia entre las personas de entre 18 y 34 años está cambiando y que muchos optan por tener una propiedad (si es que pueden o les dejan el dinero). Y no es de extrañar. Barcelona entra en el ranking de las 18 ciudades más caras de Europa tanto para alquilar una habitación, como un estudio o un apartamento. Según HousingAnywhere, la capital catalana es la novena más cara del espacio europeo en apartamentos y estudios, mientras que en alquiler de habitaciones baja hasta la 14a plaza.
La plataforma pone de relieve que, a pesar de los aumentos del precio del alquiler, se están nivelando en Europa, pero subraya que, a pesar de que parece que en el tercer trimestre de 2019 los precios han llegado a su límite, "la incertidumbre política y las reformas en las leyes del alquiler, han hecho que los inversores del mercado inmobiliario se estén planteando invertir en otros sectores", cosa que supone "escasez de viviendas y subida de precios".
El podio en precios de apartamentos lo ocupan Londres, Ámsterdam y Múnich. La capital inglesa paga una media de 1.707 euros de alquiler por apartamento, un 3,49% más que en el segundo trimestre del año; Ámsterdam está en unas cifras similares con 1.675 euros mensuales y un incremento del 5,66% y en Múnich pagan unos 1.507 euros al mes, también un 5,66% más.
Pero Barcelona es la ciudad que más eleva sus precios del alquiler durante el tercer trimeste del año y su ciudadanía ya paga un 8,55% más de alquiler que en los tres meses anteriores, porcentaje que representan unos 1.243 euros mensuales. De hecho, la ciudad condal experimenta un incremento pronunciado durante el primer trimestre de 2019, mientras que el resto crece moderadamente. Por su parte, Madrid, en la 13a fila de la tabla, destina en torno a 1.112 euros al mes, un 4,12% más que en el trimestre anterior; y en València, en la 17a posición, pagan 892 euros y ha vivido un aumento del 5,4% en estos últimos meses. La ciudad europea más barata, en este caso, es Turín.
En cuanto a los precios de los estudios, Londres vuelve a llevarse la palma pagando de media 1.339 euros mensuales, un 3,57% más, pero, a diferencia de los apartamentos, Ámsterdam baja hasta la cuarta plaza con 988 euros al mes y una subida del 6,68%. En este caso, en segunda posición se encuentra Múnich con 1.025 euros y un incremento del 4,89%, y la sigue Utrech -que en apartamentos ocupa la 8a plaza-, donde se pagan 989 euros mensuales de media.
Barcelona también se situa en la novena plaza en el ranking del precio del alquiler de los estudios con 881 euros al mes y un incremento del 6,75%, mientras que la capital española escala a la 12a posición con 837 euros y un 2,19% de aumento y Valencia cierra el ranking con una media de 592 euros mensuales y un aumento del 2,51%.
De hecho, en los últimos cinco trimestres, se observa como todas las ciudades sufren un incremento de precios del alquiler, menos Madrid, Milán, Viena y Berlín donde, durante el último trimestre de 2018, caen los precios del alquiler para volver a recuperarse con fuerza estrenando el 2019.
Finalmente, Cophenague lidera los precios de los alquileres en cuanto a las habitaciones amuebladas con una media de 722 euros al mes de media y un incremento del 3,46%. La sigue Estocolmo, donde se pagan 721 euros con un aumento del 3,53% y, en tercer lugar Londres, que destina 691 euros mensuales, un 3,16% más.
En esta ocasión, Barcelona cae hasta la 14a posición y paga 507 euros al mes de media, cifra que representa un incremento del 7,8% y, por pocas décimas, es el municipio de Europa que más sube el precio del alquiler de habitaciones amuebladas. Madrid es la ciudad más cara de todo el Estado en alquiler de habitaciones amuebladas con una media de 530 euros mensuales y un aumento del 4,52%, mientras que València, en la 17a plaza, paga 328 euros, un 2,98% más que el trimestre anterior.
¿Es la nueva moda, pues, comprar una vivienda? Seguramente, si la tendencia de precios de alquiler continúa a la alza, los jóvenes no tendrán más remedio que continuar viviendo con los padres o bien comprar una, eso si se lo pueden permitir. Y es que, como decía la directora de estudios de Fotocasa, Beatriz Toribio, "Catalunya es una de las comunidades donde han subido más los precios y dónde hay una mayor demanda, pero la gente acaba de salir de una crisis y no ha recuperado su capacidad de ahorro ni su poder adquisitivo. Hay demanda de vivienda, pero no todo el mundo consigue acceder".